Por Nayrobis Rodríguez
Banca y Negocios
Para el sector agrícola, 2023 cerró con recuperación en la producción de rubros como maíz blanco y amarillo, caña de azúcar y café.
A pesar de adversidades climáticas, estructurales y de tipo financiero, sobre todo en lo relativo a la entrega de créditos para financiamiento, la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro) considera que el 2023 fue un año cuando se consolidó el proceso de recuperación del sector agrícola que inició en 2020.
Celso Fantinel, presidente del gremio, indicó a Banca y Negocios que esta recuperación se evidenció en la producción de rubros esenciales para la dieta al venezolano: maíz blanco, maíz amarillo, arroz, caña de azúcar y café.
En cifras, Carlos Odoardo Albornoz, quien formó parte de la directiva de Fedeagro y está al frente del Instituto Venezolano de la Leche y la Carne (Invelecar) precisó que la superficie cultivada de maíz se aproximó a las 340.000 hectáreas, una cifra que calificó como significativa.
“Tomando en cuenta que más del 90% de esa área es financiada por pulmón propio del sector privado, eso es una proeza de las que no existen referencias. En ninguna parte del mundo los productores agropecuarios han financiado más de 300.000 hectáreas de su peculio, haciendo inversiones en las condiciones que tiene Venezuela”, añadió.
En cuanto a la producción de hortalizas y frutas, Celso Fantinel indicó que hasta ahora persiste un problema de oferta y demanda y de bajo consumo, debido principalmente por el poco poder de compra del venezolano.
“Se nota que escogen comer otras cosas y muchas de las hortalizas se pierden en la cadena de suministros, se pierden en el campo y eso es debido al bajo poder de compra”, sentenció.
Inversión sostenida durante cinco años
Aunque han sido tres años consecutivos de recuperación, el gremio agrario insiste en que para incrementar la producción se debe hacer una inversión de 1.500 millones de dólares en 2024, e invertir más recursos en este sector al menos por cinco años consecutivos, según lo explicó Celso Fantinel.
Con ese monto en financiamiento, el sector agrícola “podría despegar y volver a ser lo que era en los años 2008, 2009, y 2010 época en la que abastecíamos un 77% del consumo nacional”, apuntó el vocero.
Además, con esto disminuirían las importaciones de productos alimentarios y, posiblemente, limitar las compras en el exterior a la importación de trigo solamente.
“Ahora estamos importando más de 3.000 millones de dólares en alimentos y materias primas. Eso quiere decir que haciendo esas inversiones estaríamos ahorrándonos casi 90% de este gasto Y eso generaría riqueza y economía en nuestro país”, apuntó Fantinel.
Sin embargo, el panorama luce complicado con respecto al financiamiento, bajo las consideraciones de Carlos Albornoz, quien indicó que a través de la banca, el financiamiento es insuficiente.
“Es muy poco lo que se puede avanzar, lamentablemente los pocos financiamientos que se están dando se otorgan a productores de alta escala, no a los pequeños. Es decir a medida que tienes menos área, tiene menos acceso a financiamiento”, dijo el titular del Invelecar.
Pero, a pesar de esto, aseveró que la producción agrícola se ha recuperado tras alcanzar niveles mínimos de caídas durante unos 30 trimestres.
Fantinel fue enfático al apuntar que hay incertidumbre debido a que en 2023 la economía del país cerró con resultados adversos en otros sectores productivos, aunque el sector de alimentos fue uno de los mejores posicionados.
También indicó que temas estructurales y de servicios jugarán en contra, entre ellos la escasez de diésel, dificultades en el suministro energético, el tema infraestructura. “Pero creemos que nosotros los productores estamos obligados a seguir trabajando, a seguir sembrando, eso es lo que sabemos hacer”, dijo.
El empresario agrícola apuntó que el tema climático es otra de las variables de peso.
“Hemos visto regiones donde llueve mucho, regiones donde hay mucha sequía, de manera que tener soberanía agroalimentaria para los venezolanos es importante y eso lo entendemos en Fedeagro, por eso estamos haciendo un gran esfuerzo en producir alimentos», manifestó el dirigente.
Igualmente, «sabemos que muchas materias primas han bajado, en el mundo nos hacen una competencia desleal porque entran sin aranceles y sin IVA al país”, añadió Fantinel.
El 9 de enero, el Ministro de Agricultura, Wilmar Castro Soteldo, anunció el Plan Agrícola que prevé implementar la administración de Nicolás Maduro durante este año, en el cual estiman la producción de más de 23 millones de toneladas de materia prima.
En una publicación en el perfil oficial de Instagram de la cartera ministerial, se indicó que el país deberá avanzar “con una producción de 23.813.766 toneladas de materia prima para la industria y el consumo fresco del país”.
“Durante una reunión de trabajo desde la sede principal del Ministerio de Agricultura Productiva y Tierras, el titular del referido despacho Wilmar Castro Soteldo explicó que la materia prima está distribuida en un 25% en el sector animal y un 75% en el sector vegetal”, explica la publicación.
Con esto, la administración de Nicolás Maduro estima un área de cultivo de 12.477.834 hectáreas, «de las cuales se aprovecharán 2.669.046 para el sector agrícola y 9.808.788 para el sector ganadero”.